Ya he vuelto de Holanda y he de confesar que he sufrido o, mejor dicho, han sufrido mis pies. Con casi -10º de temperatura y una sensación térmica de -12º, hay que ir muy bien equipado y, yo, no lo iba. O por lo menos, en lo que a calzado se refiere.
Ya os comentaba antes de irme, en el post anterior, que me había comprado unas botas de agua para sobrevivir a varios días de lluvia (obviamente ni yo ni las previsiónes meteorológicas esperábamos nieve). Pues bien, esta imagen fue tomada en mi primer día de aventura en la nieve con mis inapropiadas botas anti-lluvia:
Ya os comentaba antes de irme, en el post anterior, que me había comprado unas botas de agua para sobrevivir a varios días de lluvia (obviamente ni yo ni las previsiónes meteorológicas esperábamos nieve). Pues bien, esta imagen fue tomada en mi primer día de aventura en la nieve con mis inapropiadas botas anti-lluvia:

--
María
--
2 comentarios:
ay pobre¡¡¡¡¡ vaya frio de debiste de pasar menos mal que encontraste las otras botas, que de todas formas no estan mal, un poco brutas en la punta pero por el resto estan muy bien.
http://lamodadepaty.blogspot.com
al parecer no ayudaron mucho... pero si vale la pena comprarse unas, esta muy padres!
Publicar un comentario